Hoy habría cumplido 99 años. Casi un siglo desde que llegó al mundo el hombre que, según Josette Sheeran, directora del Programa Mundial de Alimentos (PAM) de la ONU, ha salvado más vidas en la Historia de la Humanidad. Algunos las cifran en más de 1000 millones. Cómo no rendirle este pequeño homenaje.
Fue un ingeniero agrónomo, genetista, fitopatólogo y humanista. El solo quería mitigar el hambre que había en el mundo.
Era bisnieto de noruegos emigrantes a EEUU. Ya desde pequeño supo lo que era trabajar duro. De los 7 a los 9 años trabajó en las 43 Ha. de la granja familiar en Iowa, pescando, cazando, levantando maíz, avena y cuidando el ganado. Él mismo había visto la Gran Sequía estadounidense en la década de 1930 y en las villas del siglo XX en México, India y África. Fue a la escuela primaria y posteriormente a la Universidad de Minnesota, pagándose los gastos desempeñando diversos trabajos. Se diplomó en Ciencias Forestales en 1937 pero luego obtuvo su licenciatura, y en 1942, su doctorado, ambos en fitopatología y genética. En aquella época estaba la II Guerra Mundial y la población rondaba los 2.300 millones de personas.
Dejó su huella en la agricultura gracias a un compromiso personal y profesional con la lucha contra el hambre y la pobreza. Su primer logro llegó en México, donde desarrolló variedades enanas de trigo de alto rendimiento y amplia adaptación, que además, eran resistentes a enfermedades y con gran calidad industrial. Cabe recordar que en aquel momento, México tenía que importar la mitad del trigo que consumía lo que lo empobrecía aún más. Con estas nuevas variedades, el país incrementó notablemente su producción. En poco tiempo, muchos países como India, Pakistán, Turquía, Túnez, España, Argentina o China se beneficiaron de las nuevas variedades y de la tecnología desarrollada en México. Se empezó a hablar de "La Revolución Verde".
En 1970, le fue otorgado el Premio Nobel de la Paz. La población mundial entonces era de 3.700 millones de habitantes. El Comité del Premio Nobel concluyó:
“más que cualquier otra persona de esta época, ha ayudado a entregar pan al mundo hambriento. Hemos tomado esta decisión con la esperanza de que satisfacer el hambre también conlleve la paz del mundo... Ha ayudado a crear una nueva situación en el orbe y ha traducido el pesimismo en optimismo en lo que se refiere a la dramática carrera entre explosión demográfica y nuestra producción de alimentos”.
Norm, como le gustaba que lo llamaran sus amigos, fue un ferviente defensor de los cultivos biotecnológicos y genéticamente modificados, y los concebía como una de las herramientas tecnológicas para garantizar la seguridad alimentaria en el futuro.
Según sus palabras:
"Durante la década pasada, hemos presenciado el éxito de la biotecnología vegetal. Esta tecnología ayuda a los granjeros de todo el mundo a lograr una mayor producción, al mismo tiempo que se reduce el uso de pesticidas y la erosión del suelo. Los beneficios y la seguridad de la biotecnología se han corroborado durante la última década en países en los que habita más de la mitad de la población del mundo. Lo que necesitamos es valor por parte de los líderes de estos países donde a los granjeros no les queda otra opción más que usar métodos obsoletos y menos eficientes. La revolución verde y, ahora, la biotecnología vegetal ayudan a satisfacer la creciente demanda de la producción de alimentos, al mismo tiempo que se preserva nuestro ambiente para las generaciones futuras"
Norman Borlaug falleció a los 95 años, el 12 de Septiembre de 2009, en su finca de Dallas. En el mundo ya había casi 7.000 millones de personas.
Hoy, un recuerdo para el Prof. Norman Borlaug. Y una sola palabra. GRACIAS.
Fuentes:
www.wikipedia.es
www.isaaa.org/
www.monsanto.com
www.cienciadebolsillo.com
NOTA 1: Este post participa en la IV Edición del Carnaval de Humanidades que aloja Kurt Friedrich Gödel en su blog Literatura es aprehender a la realidad.
GRAN hombre. Así, en mayúsculas, tal cual lo pones.
ResponderEliminarPues sí, Félix. Objetivamente, cualquier persona debería pensar lo mismo, aunque dudo que sea así.
EliminarGracias por pasarte por aquí y comentar :-)
Un saludo
La de gente que le debe la vida. No está mal recordarlo.
ResponderEliminarPor eso mismo no quería pasar la oportunidad de hacerlo. Solo por el hecho de que Farth lo haya descubierto por este post, ya ha valido la pena ;-)
EliminarIncreíble. Y yo sin conocer a este indivíduo ni saber nada de su obra... ¡Menos mal que leo blogs de gran calidad! ;-)
ResponderEliminarMuchas gracias por presentar a este hombre y recordarlo. Voy a curiosear un poco más sobre su vida =)
Gracias por el cumplido Vic :D
EliminarMe alegro de haberte presentado a uno de los hombres más importantes de este siglo. Alguien que merece el Premio Nobel de la Paz que ganó y todos los respetos por conseguir lo que consiguió. Profundiza en su vida Vic. Yo solo he puesto una pincelada pero merece la pena conocerla para valorarlo aún más.
Un abrazo!
Gracias por esta biografía, no la conocía y mira que cuando quise meterme en la investigación quería estudiar edafología y química agrícola, además del español José María Albareda ya tengo otro referente más famoso y Nobel de la Paz, ¡gracias!
ResponderEliminar[Inciso publicitario: ¿No querrías que participara en el IV Carnaval de Humanidades]
Elementa!! qué alegría verte de nuevo (estoy perdidilla, como te habrás dado cuenta).
EliminarSé que te gusta (mucho) la edafología, y me ha hecho gracia lo del español referente. Yo trabajo en un centro de Ciencias Agrarias. Sabes cómo se llama la calle donde estoy? Profesor Albareda ;-)
Te digo como a Vic. Me alegro un montón de habértelo descubierto porque es uno de los hombres que han dejado huella en el mundo. Por su lucha y por su legado científico, del cual, se han beneficiado millones de personas. Investiga sobre él. Te sorprenderá.
Y sobre el inciso publicitario.... es que no sé quién lo lleva este mes :S A ver si me entero y entro.
Gracias guapa!
Bonito post sobre un gran hombre, y muy desconocido. Lo de haber conocido lo que es el trabajo duro en el campo es importante, cosa que desconocen mucho ecologistas. Habría que dar a conocer más las vidas de personas como esta, para que la gente tuviera unas referencias más realistas.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo contigo. Me sorprende que no sea más conocido. No hace ni 4 años que murió. Me refiero a que es contemporáneo nuestro y mucha gente seguro que no sabe lo que hizo ni que fuera Nobel de la Paz!
EliminarGracias por pasarte y comentar Aitor :-)
Me ha encantado Amara, con tu permiso me lo llevo para compartirlo con mis amigos del "Otoño..", creo que les interesará muy mucho. Por supuestísimo diciendo bien claro quien es su autora y poniendo el enlace a tu blog. Bss.
ResponderEliminarClaro que sí emejota!
EliminarMe alegro que te haya gustado. :-)
Besos y gracias por compartirlo
Articulos como este deberían ir en la prensa digital y de papel, a diario y darse en radio y tv y oirse en el metro. No sólo sabríamos cosas importantes que no sabemos sino que iríamos dando a la Ciencia un lugar que aún no tiene en nuestro entorno y su significado como acontecimiento en nuestras vidas y en la comprensión del universo. Leñe! Se agradece la labor!
ResponderEliminar:-) Muchas gracias Anónimo. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Seguiremos luchando porque la Ciencia y los científicos sean reconocidos como los artífices del avance del que nos beneficiamos todos.
ResponderEliminarGracias por tu comentario y un saludo!
Hum, no conocía a este hombre. Me parece un descubrimiento la mar de interesante.
ResponderEliminarGracias por traerlo a la luz.
Gracias a ti, Antonio.
Eliminar¡Me alegro de verte por aquí!