lunes, 13 de febrero de 2012

Pseudociencias en la UGR... ¡¡alerta magufo!!

Durante casi 5 siglos, la Universidad de Granada ha sido testigo singular de la Historia, con una gran influencia en el entorno social y cultural de la ciudad. Fundada en 1531, por iniciativa del Emperador Carlos V mediante una Bula del Papa Clemente VII, continuaría desde ese momento la tradición de la Universidad Árabe de Yusurf I más conocida como La Madraza o Palacio de la Madraza, del siglo XIV. 


La Madraza,  fundada por Yusuf I (1349) fue la primera Universidad de Occidente
al estilo de la norteafricana y la primera de Granada. También fue edificio religioso y
dedicado al estudio de las ciencias teológicas y la jurisprudencia.         


481 años después de su fundación, la UGR es una de las universidades públicas que ha afrontado en los últimos años el mayor crecimiento de su larga vida, situándola entre las pocas universidades españolas que ha aparecido en todas las ediciones de los más prestigiosos rankings mundiales de universidades. Además, aprovechando las nuevas tecnologías, la UGR también es la universidad española más popular en internet

La UGR sigue siendo la universidad europea que más Erasmus recibe (más de 2.200) y la que más envía. Actualmente, y espero que siga siendo así, ofrece a los estudiantes internacionales una experiencia única pudiendo desarrollar sus estudios en un ambiente de calidad, innovación, diversidad, igualdad y tolerancia. De hecho, los Erasmus que vienen, destacan de la UGR:
  • Amplia oferta académica de grado y postgrado
  • Calidad de la docencia
  • Prestigio de la UGR en sus países
  • Trato cercano con el profesorado
  • Intensa actividad académica y cultural que la UGR ofrece
  • Ambiente internacional en sus aulas (10% de grado y 30% postgrado son internacionales)
No nos engañemos. Algún que otro motivo extra-académico también les atrae... No queda bien decir que en esta ciudad el tiempo es espléndido. Disfrutamos de un sol y una temperatura envidiables, tenemos mar y montaña cerca, es una ciudad barata y sobre todo, lo más preciado por los estudiantes..... ¡el tapeo!


Pues bien... parece que el tirón del renombre de la UGR, no es aprovechado sólo por sus alumnos.





Supongo que después del tiempo y del prestigio adquirido, decir UGR ya es un aval. Lástima que como ya ocurrió con la Universidad de Zaragoza y la homeopatía, la Universidad de Granada se una al carro de las pseudociencias. 

Así que vaya este post para aquellos alumnos potenciales que piensen "invertir" su dinero -estamos hablando de 1.100 € anuales y son 3 cursos- en estos programas docentes

Os facilito un breve resumen:

Os matricularéis en cursos impartidos por el Instituto Confucio (IC) de la Universidad de Granada, bajo el nombre "Cursos de Formación de Técnico en Qigong" y "Cursos de Formación de Técnico en Taijiquan", básicamente destinados a manejar una quimérica "chi" (energía vital), el arte de la alquimia interna o aprender los estiramientos de meridianos de pulmón a intestino delgado por poner un ejemplo, aunque el programa promete mucho más. No en vano, 3 años darán para conocer cada poro de tu cuerpo. 

El profesorado de dichos cursos no será profesorado. Me explico. De los 12 docentes previstos, sólo 2 son profesores universitarios bien cualificados. Uno del Departamento de Ciencias Jurídicas Básicas de la Universidad de Las Palmas y el otro, profesor de la UGR de Lingüística General y Teoría de la Literatura. Ahh, y el director técnico de ambos cursos ni siquiera es miembro de ninguna universidad. Un profesorado altamente cualificado! 

Los cursos se han organizado entre la UGR y las "Escuelas superiores" en artes marciales Wudao y Serrato (que parecen ser la misma organización con dos nombres), entidades privadas que utilizan en su publicidad los símbolos institucionales de la UGR. La máxima responsable del IC es la Vicerrectora de Relaciones Internacionales de la UGR (¿¿??) y los cursos serán impartidos (si Confucio no lo evita) en la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte.

Por suerte, parece que podrán ser reconocidos créditos de libre configuración! una buena noticia chic@s

En vista de lo anterior, a mediados de diciembre de 2011, Uni Laica Granada (Asociación por la Defensa de una Universidad Pública y Laica) denunció este hecho y solicitó al Rector y a la Vicerrectora de RRII y al equipo directivo del IC de la UGR información sobre los aspectos dudosos de estos cursos. Dado que el carácter pseudocientífico de sus contenidos teóricos es obvio, también piden, lógicamente, la retirada del apoyo institucional.  

La última noticia que tenemos al respecto es de hace un par de días: la UGR ha solicitado un plazo de dos semanas para analizar "los datos que se publicitan de los cursos en la web, ver quiénes los imparten y el curriculum que ofertan". 

Sinceramente, espero que esta denuncia prospere y estos cursos no lleguen jamás a realizarse. Hasta ahora, iba con la cabeza alta cuando decía que había estudiado y pertenecía a la UGR. Ahora, me da vergüenza que esta Institución pueda relacionarse con pseudociencias.


PD a los alumnos de la UGR: Por favor, informaros bien antes de formalizar la matrícula en un curso organizado por una asociación a título particular. Haced caso de la más elemental prudencia y poneos en guardia. Muchas veces es palabrería y sacar dinero al que pica, pero otras veces, puede ser algo peor (léase secta) de la que es difícil salir


miércoles, 8 de febrero de 2012

¿Fijamos nitrógeno? le dijo la bacteria a la planta

"Ciencias de la Naturaleza", "Conocimiento del Medio" o "Naturales"... el nombre de la asignatura ha cambiado con el tiempo pero en algún momento de nuestra vida estudiamos con ella los ciclos de los elementos: carbono, nitrógeno, fósforo... ¿os acordáis? probablemente no.

Pues bien, en este post, vamos a repasar únicamente la importancia del nitrógeno para las plantas y concretamente, la FIJACIÓN BIOLÓGICA DEL NITRÓGENO llevada a cabo por microorganismos.

La fijación del nitrógeno puede tener lugar de manera abiótica mediante la formación de óxidos como consecuencia de la combustión de compuestos orgánicos, descargas eléctricas, etc, que son arrastrados al suelo por la lluvia o amonio por el proceso industrial Haber Bosch. También puede ser un proceso biótico, mediado por microorganismos que reducen el nitrógeno a amonio y es incorporado a la biosfera.


Ciclo del nitrógeno, de forma general

Supongamos que las necesidades de agua están cubiertas, que es mucho suponer. El siguiente factor limitante para el crecimiento de las plantas lo constituye el nitrógeno. Las plantas lo necesitan entre otras cosas para formar proteínas, ácidos nucleicos, hormonas, etc. de manera que si hay una deficiencia de nitrógeno, disminuye el crecimiento de la planta, el de sus hojas y sus frutos, y aparece la clorosis ante la imposibilidad de sintetizar clorofila (responsable del verde saludable de las plantas). Pero ojo!, que la clorosis no sólo puede deberse a una deficiencia de N sino también a otros factores.

Hojas cloróticas... verde que te quiero verde

El quid de la cuestión, es que a pesar de la abundancia de nitrógeno en la atmósfera (78%) la mayor parte del N disponible en suelo se encuentra en forma orgánica y las raíces únicamente pueden tomarlo en forma de iones nitrato (NO3-) y amonio (NH4+), por lo tanto, se requiere una actividad microbiológica que convierta el nitrógeno en asimilable para la planta.

Por ello, la fijación biológica de nitrógeno (FBN) tiene un enorme interés que ha determinado que sea objeto de intensa investigación desde que en 1888 fue descubierta, aunque empíricamente era ya aprovechada por los romanos cuando observaron el efecto beneficioso de la rotación de cultivos. Por dar un dato, de los 250 millones de toneladas de nitrógeno que se incorporan a la biosfera debido a la fijación del nitrógeno, 150 millones provienen de la fijación biológica. Desde el punto de vista ecológico, la FBN cobra mayor interés, dado que puede evitar el uso abusivo de fertilizantes nitrogenados, con el consiguiente ahorro en el consumo de energía y la disminución de la degradación del medio. Además, es importante señalar la importancia de la FBN en el mar, por la necesidad de nitrógeno asimilable disponible que requieren los océanos para actuar como sumideros del CO2 de la atmósfera.

Este proceso microbiano es llevado a cabo por procariotas en vida libre o en simbiosis.


Algunas de las bacterias o asociaciones biológicas
que llevan a cabo la fijación de nitrógeno en la naturaleza

Se trata de un proceso altamente consumidor de energía. El triple enlace que une los dos átomos de nitrógeno es difícil de romper. El trabajo lo lleva a cabo la enzima nitrogenasa consumiendo 16 moléculas de ATP por 1 de N2 reducido, según la ecuación:


Algunos fijadores libres, como Azotobacter, requieren hasta 100 unidades de equivalentes de glucosa por unidad de nitrógeno fijado. Por ello, su importancia agrícola es baja, pero se incrementa considerablemente en el caso de la fijación simbiótica, como la establecida entre Rhizobium y las leguminosas (a la que dedicaremos un merecido post en exclusiva), donde la relación disminuye a 6-12 unidades de glucosa consumidas por unidad de nitrógeno reducido. En este caso, además, la fuente de energía son los compuestos carbonados suministrados directamente por la planta derivados de la fotosíntesis, mientras que los fijadores libres han de tomarlos del suelo donde no existen en cantidad ni forma necesarias. De hecho, Azotobacter proporciona al suelo unos cientos de gramos de nitrógeno/Ha/año mientras que este valor llega a ser, en el caso de la asociación Rhizobium con alfalfa, trébol, guisante o soja, de unos ¡cientos de kilos!. A pesar de estas diferencias, la fijación simbiótica, aunque tenga mayor rendimiento, está limitada a unas pocas especies vegetales, entre ellas las leguminosas, de gran importancia económica y social. 

Aunque todos los organismos y sistemas fijadores de nitrógeno son susceptibles de ser aprovechados en agricultura y de hecho se pueden encontrar referencias en la bibliografía al respecto, hay algunos que son más útiles que otros, no sólo por la eficiencia del proceso y por los niveles de nitrógeno que incorporan, sino también, por el interés de los cultivos susceptibles de ser tratados. Los sistemas potencialmente más útiles, implican de una forma más o menos íntima, un hospedador con el que la bacteria establece la asociación beneficiosa.

Entre ellos, vamos a diferenciar tres sistemas.

1. El primero recoge lo que se llaman rizocenosis asociativas, por no formarse estructuras especializadas en las raíces en la asociación microbio-planta. Encontramos aquí, la asociación entre plantas C4 tipo maíz o caña de azúcar y Gluconobacter, Azoarcus, Herbaspirillum o Azospirillum. Aquí la bacteria fija nitrógeno a expensas del exudado radical, que aprovecha a la perfección cuando se lo encuentra al colonizar los espacios intercelulares del córtex de la raíz. En este caso (concretamente con Azospirillum) se ha demostrado que la mayor producción vegetal es debida a la capacidad de la bacteria de producir fitohormonas que determinan un mayor desarrollo de la raíz.


2. En un segundo sistema intervienen cianobacterias y algunas plantas entre las que ciertos helechos, como Azolla, pueden jugar un papel importante en la fertilización de los cultivos de arroz. Los niveles de nitrógeno aportados a estos cultivos pueden hacer al arroz bastante independiente de la fertilización nitrogenada. Esta práctica es frecuente especialmente en el Sudeste asiático, cómo no. Las cianobacterias han desarrollado estrategias especiales dirigidas a la convivencia de la fotosíntesis oxigénica con la fijación, a diferencia de Gleothece o Synechococcus, en las que ambos procesos están separados temporalmente, realizando la fotosíntesis de día y la fijación por la noche.

 
Azolla caroliniana o Helecho mosquito

Izquierda: Cianobacteria Spirulina vista al microscopio. Derecha: comprimidos de Spirulina
empleados como complemento nutricional por su alto contenido proteico de elevado
aporte biológico y vitamina B12


 3. En el tercer sistema, encontramos las endorrizobiosis mutualistas y dentro de estas, la actinorriza, que se establece entre Frankia (un actinomiceto) y algunas plantas leñosas, como el aliso o la casuarina. Desde el punto de vista agronómico, la más importante (y también formando parte de este tercer grupo), es la asociación Rhizobium-leguminosa. Ha sido y sigue siendo la más estudiada. Estas bacterias se suelen englobar dentro del término genérico de Rhizobium o rizobios, pero no olvidemos que encontramos géneros tan diversos como Rhizobium, Sinorhizobium, Allorhizobium, Bradyrhizobium, Mesorhizobium y Azorhizobium.

La mayoría de las especies de la familia Leguminosae forman esta asociación. En las raíces de estas plantas aparecen cuando son infectadas por Rhizobium, unas tumoraciones de distinta forma y tamaño, con un ligero color rosáceo debido al contenido de leghemoglobina, denominadas nódulos. En estas estructuras se lleva a cabo la fijación de nitrógeno.

Tranquilos, ahora no me extenderé en este tipo de asociación. Se conoce mucho sobre ella y como os digo, por ser la más estudiada y la más importante desde el punto de vista agronómico, merece un post solito para ella centrándonos en la fisiología y genética del proceso. De momento, fijaos en los nódulos que denotan la presencia de la bacteria.





Se puede pensar que desde el descubrimiento de la fijación biológica de nitrógeno en 1888 ya se ha investigado lo suficiente para aprovechar en agricultura todo el potencial de este proceso microbiano. Sin embargo, existen todavía muchos aspectos desconocidos o mejorables que requieren su estudio además de la posible extensión del carácter fijador a otros sistemas.

Lanzo una pregunta a la audiencia... ¿creéis que tiene futuro la investigación en FBN y su aplicación? ¿qué me decís vosotros?

Más información:


PD: Este post participa en la XII Edición del Carnaval de Química, que en esta ocasión se aloja en el reciente blog Historias con Química de @mariadocavo, y en la X Edición del Carnaval de Biología en casa del "centenario" Scientia