miércoles, 4 de enero de 2012

"Yo micorrizo" de Polonia a Granada

Encontrar una información de Investigación y Ciencia en la prensa local ya es noticia, pero si encima es sobre micorrizas, ¡estamos de enhorabuena! Así que no podía dejar pasar la ocasión de transcribirla. Para el que no sepa lo que es una micorriza y para qué sirve, pasaros por aquí que está todo muy bien explicadito ;-)
Antonio Ramos está a punto de cumplir 60 años. Toda su vida se ha dedicado a la agricultura. Una tradición familiar que se inició hace tres generaciones y que se ha centrado, principalmente, en el cultivo del chopo en la Vega de Granada. Antonio es un hombre inquieto, preocupado por la tierra, por su conservación y por el futuro de esta actividad profesional. Llevado por esta preocupación y por la necesidad de reaccionar ante la situación tan crítica que viene atravesando el campo desde hace tiempo, se propuso buscar alternativas para sus cultivos centrados en la producción de chopos. Empezó a investigar y a interesarse por lo que se hacía en otros países europeos y encontró una posible alternativa: destinar parte de sus plantaciones de chopo a la producción de biomasa, sistema alternativo de combustible no contaminante.


A la izquierda, Antonio Ramos muestra algunos ejemplares de chopos microrrizados
al investigador y al gerente de la empresa polaca Mykoflor, en su finca de Santa Fe. Fte: IDEAL


Su interés por este campo le ha llevado a participar en varios proyectos de investigación europeos que han tenido como escenario sus tierras situadas en el municipio de Santa Fe. "Me gusta investigar otras cosas. He visto cómo mis antepasados trabajaban con animales para transportar la madera, luego vino el tractor y después la motosierra... Hay que evolucionar", defiende este agricultor granadino.

Ha viajado a Polonia, Irlanda, Bélgica, Italia, Suecia y por toda España asistiendo a congresos y visitando fincas con la intención de saberlo todo sobre la producción de biomasa, práctica desconocida hasta hace una década en la agricultura española. "No contaminar", esa es su máxima. "El labrador, por norma, es el primero que tiene que estar con el medio ambiente y tiene que defender lo suyo", afirma convencido.

Su carácter innovador le ha llevado a ser pionero, en Granada, en la utilización de nuevos métodos que se están investigando para acelerar y mejorar la calidad y cantidad de la producción de chopos, como el uso de biofertilizantes o la inoculación con micorrizas que permite reducir el riego en este tipo de plantaciones. Desde 2007, Antonio Ramos, colabora con un grupo de expertos polacos en la investigación y producción comercial de este tipo de hongos. Para ello no ha dudado en micorrizar dos hectáreas de su finca con hongos procedentes de la empresa polaca Mykoflor, especializada en la producción comercial de micorrizas para diversos cultivos como el chopo, la vid o el olivo.



Extensión de las raíces cuando la planta está
micorrizada. De hecho, se dice que la planta
no tiene raíces, sino micorrizas.
Hasta Santa Fe se han desplazado recientemente el gerente y uno de los cientíticos de Mykoflor para comprobar, de primera mano, los primeros resultados de la inoculación llevada a cabo en las tierras de Antonio. Para el profesor Andrzej Klasa, del Departamento de Química Agrícola y de Protección del Medio Ambiente de la Universidad polaca de Warmia y Mazuria de Olsztyn, esta ha sido su séptima visita a Granada, ya que ha participado en varios de los proyectos europeos que han tenido lugar en las fincas del agricultor granadino. Se conocieron hace 6 años cuando Antonio formaba parte del proyecto de investigación europeo BIOPROS, en el que se estudió la influencia del uso de aguas y lodos residuales en el crecimiento de los chopos con el fin de acortar el ciclo vegetativo de la producción de madera destinada a biomasa. Los estudios de campo correspondientes a España se realizaron en Santa Fe. En una de estas visitas del proyecto BIOPROS, el profesor Klasa comprobó el problema de sequía existente, en aquel momento, en el campo andaluz y le propuso a Antonio experimentar con micorrizas para que sus plantaciones pudieran sobrevivir en períodos de falta de agua. "Los agricultores españoles tienen que buscar cómo usar el agua para regar las plantas y esto tiene el coste medio ambiental de que puede faltar agua y es un problema que hay que resolver. Lo que estamos haciendo con este experimento es estudiar el uso de hongos para no tener que emplear  tanta agua para regar". El profesor polaco quedó "muy satisfecho" con los resultados obtenidos en la finca de Antonio y con el crecimiento de los chopos micorrizados. En 6 meses sin siego los chopos habían alcanzado una altura de 5 metros.

Igual de satisfecho se ha mostrado Wlodzimierz Szalanski durante su visita a tierras granadinas. "Estoy impresionado por los resultados", explica rodeado de chopos. La comercialización de las micorrizas es para este empresario polaco "un buen negocio", pero con un objetivo medioambiental claro, "sobretodo tiene que servir a la sociedad. Si hay muchos bosques todo el mundo está contento y esto repercute en el cambio climático".



Comparación de abetos micorrizados (izquierda) y
no micorrizados (derecha). Foto de E. Barniskis



Antes de inocular sus cultivos, Antonio Ramos regaba sus tierras cada 20 días, entre ocho y nueve riegos, a "manta", es decir, inundando toda la finca. "El consumo de agua es de entre 8 y 12.000 metros cúbicos, dependiendo si la finca está nivelada o no. Del total del coste que tiene una alameda tradicional, el 40-45% se lo lleva el riego. Esto antes de podía asumir, hoy no". Su apuesta por el uso de micorrizas es clara, "ampliaré la inoculación" Este es un coste que ya tengo previsto -el precio de inocular una hectárea de chopos es de 1.000 €- cuando ponga más alamedas, sean para lo que sean, bien para madera o para biomasa, yo micorrizo". Para Antonio el éxito de esta  iniciativa experimental con el chopo no es mérito solo de las micorrizas sino de la calidad y fertilidad de las tierras de la Vega de Granada.

Fuente: IDEAL


NOTA PERSONAL: Aunque es algo que ya está sobradamente demostrado (y hemos publicado diversos artículos al respecto), hace más de 6 años demostramos que la utilización de micorrizas mejoraba el estado hídrico de las plantas en condiciones de sequía, (el aumento de la producción de biomasa de parte aérea, el potencial hídrico mayor y la disminución de daño oxidativo). Este estudio fue publicado en Journal of Experimental Botany (12/187 Plant Sciences y un IF: 4.81)
Porcel R, Ruiz-Lozano, JM. J. Exp. Bot (2004) 55 (403): 1743-1750



4 comentarios:

  1. Ya lo decía la canción de Ana Belen, "Micorrizame, llevame contigo, que bajo mi cama tendrás abrigo..."

    Muy interesante el post amara.

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  2. jajajajaja Tienes buen gusto! aunque yo prefiero esa de "Arde París, arde París y en tu piel se para el tiempo..."

    Gracias por tu comentario Anónimo. :-)

    Un saludo

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  3. Guau! pedazo de trabajo amarita!!!!...ah! y enhorabuena por ese artículo en JEB...nada menos que un IF de 4.81 !!!!!
    Genial!!!
    Quique

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  4. Gracias jefe!!!!! y gracias también por pasarte por aquí!! :-))

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